Los generativistas
Los generativistas también lloran. Es un hecho.
¿Quién dijo que el mundo de la sintaxis era puro análisis sin sentimientos? Esta chapa rinde homenaje a esos valientes generativistas que, entre árbol y árbol, también dejan escapar alguna lágrima. Porque, seamos sinceros, incluso Chomsky tiene días en los que el sintagma nominal se le atraviesa.
Perfecta para profesores de lengua, estudiantes de filología o cualquier alma noble que haya sobrevivido a un curso de teoría generativa. Úsala y deja claro que no hay nada de malo en llorar un poco cuando la estructura profunda se complica. Al fin y al cabo, ¿quién no se emociona al ver un buen diagrama sintáctico?